Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 8: Realidad

ALICIA

El filo frío de la daga aún está en mi cuello mientras él me empuja contra la pared.

—Aki...—murmuré. Mis labios temblaban. Todo mi cuerpo estaba tenso y no podía mover ni un dedo aunque quería empujarlo en ese momento.

El sudor goteaba en mi cara y si no fuera por sus manos en mi cuer...