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El cadáver

CAPÍTULO SEIS

AVRIL

Ariel, Shelly (mi doncella personal) y yo corrimos hacia la puerta.

—Una mujer fue asesinada por un hombre lobo anoche, su cuerpo fue encontrado esta tarde después de que su familia reportara su desaparición —nos dijo Jumai mientras nos acercábamos a ella.

—Tienen que tener mucho cuidado, ya que fue asesinada justo al lado de su edificio, quién sabe, podrían ser su próximo objetivo. Fue atacada y asesinada cuando volvía del trabajo. Investigaremos este asunto a fondo y atraparemos al criminal —añadió uno de los oficiales de policía.

Mi corazón comenzó a latir rápidamente, el hecho de que fue asesinada por un hombre lobo anoche durante la luna llena justo al lado de nuestro edificio me puso la piel de gallina.

Ariel y yo intercambiamos miradas, él me dio una mirada tranquilizadora que todo estaba bajo control.

Los oficiales se fueron y Jumai cerró la puerta.

—¡Ariel! ¡Avril! —nos llamó Jumai deteniéndonos cuando estábamos a punto de escabullirnos a nuestra habitación.

—¿S... sí? —contestamos al unísono y nos giramos.

—¿Dónde estaban anoche? —preguntó con las manos en la cintura.

—¿Eh? —respondí rascándome la cabeza.

—¿Eh? —me imitó.

—Solo fuimos a ver a alguien, es parte de nuestro proyecto escolar —dijo rápidamente Ariel.

Le lancé una mirada...

—¿Qué clase de proyecto es ese en la noche de luna llena? —preguntó Jumai acercándose a nosotros. Dimos dos pasos hacia atrás.

—Hermana, ¿por qué estás tan paranoica? No hicimos nada malo —dije y Ariel parpadeó mirándome.

Parecía que no le gustó mi respuesta.

—Nunca dije que lo hicieran, bueno, excepto si lo hicieron —dijo cambiando su mirada de una persona a otra, y luego de nuevo a la primera persona.

—No hicimos nada, solo fuimos a trabajar en un proyecto con un amigo. En realidad, era mi proyecto, solo necesitaba un acompañante, así que le pedí a Avril que viniera conmigo —mintió Ariel.

—Escucharon lo que dijo el oficial de policía —dijo Jumai haciendo que mi corazón diera un vuelco.

—Si quieren seguir caminando por la noche para que los maten como a la señora por los hombres lobo, no olviden a qué se dedican sus padres —añadió.

Solté un profundo suspiro de alivio.

—Gracias, hermana, seremos cuidadosos —dijimos Ariel y yo al unísono. Ese era nuestro himno nacional cada vez que Jumai nos regañaba.

—Vayan a sus habitaciones, todavía tienen que asistir a la escuela mañana —dijo y comenzó a subir las escaleras hacia su habitación.

Avril y yo nos reímos. Nos tomamos de las manos mientras caminábamos hacia la habitación de Avril para hablar sobre el incidente.

~

Salté sobre la cama de Avril y él se sentó a mi lado.

—¿Crees que la maté? —le pregunté a Ariel después de que nos acomodamos.

Él me miró por un momento. No podía recordar lo que sucedió anoche, todo lo que podía recordar era que me transformé en un hombre lobo.

—No creo que lo hicieras, Avril, eres una buena persona y no matarías a nadie sin importar el estado en el que te encuentres —respondió Ariel.

Amo tanto a este hermano mío. Lo amo muchísimo.

—Pero ya no soy la Avril que era, ahora soy un monstruo —dije tristemente.

—No, querida, no eres un monstruo y nunca lo serás. Hay hombres lobo buenos y amables, toma a Tyson como ejemplo —respondió.

—¿No crees que soy un monstruo? —le pregunté.

—Por supuesto que no, querida, ve a dormir para que puedas despertar a tiempo —respondió y se acostó en su cama boca arriba.

Le di un beso en ambas mejillas y me alejé. Quería contarle sobre Chris, pero me daba demasiada vergüenza.

No quería dormir sola en mi habitación, tenía demasiado miedo. No quería que el fantasma de la mujer me persiguiera, así que fui a ver a Jumai y le rogué que me dejara dormir en su habitación.

Ella me abrazó fuertemente y me acurrucó hasta que me dormí.

CHRIS

Estaba en la cafetería esperando pacientemente a que llegaran Avril y Sally para hacer su pedido. Ya había decidido que ganaría su corazón sin importar lo que me costara.

Me acomodé al ver a Avril y Sally, estaban conversando alegremente. La sonrisa de Avril podría derretir cualquier roca dura.

Me quedé en una esquina del mostrador y esperé pacientemente a que terminaran de hacer su pedido.

—Déjame encargarme de la cuenta —le dije al camarero inmediatamente después de que les entregó su comida.

—¿Crees que no podemos pagar por nosotros mismos? Añade su cuenta a la nuestra —dijo Avril al camarero.

—Avr...il, ¿por qué no dejas que él pague? Solo está tratando de ayudar —dijo Sally sonriendo mientras Avril le lanzaba una mirada de "¿qué te pasa?".

Me reí entre dientes.

—No tengo malas intenciones, querida, solo quiero ser un caballero, pero si quieres pagar mi cuenta, está bien.

—No somos amigos, deja de actuar como si lo fuéramos —dijo Avril con desdén.

Había una gentileza en su voz, ya no era como antes cuando era tan hostil. Su voz parecía como si solo estuviera forzando la hostilidad ahora.

Ambas caminaron hacia una mesa con su comida, yo también hice mi pedido y me acerqué a ellas después de tomar mi bandeja de pollo y queso.

—¿Puedo unirme a ustedes? —les pregunté sonriendo de una a la otra.

—¡Claro, por supuesto que puedes unirte a nosotras! —dijo Sally emocionada. Avril puso los ojos en blanco.

—Quiero decir, no vinimos a esta cafetería con una mesa, así que puedes sentarte donde quieras —añadió Sally acomodándose.

Seguía sonriendo.

'Si tan solo supiera que desearía poder echarla de la mesa' me reí para mis adentros.

—Siempre podemos irnos y conseguir otra mesa ya que no vinimos a la cafetería con una mesa —dijo Avril poniendo los ojos en blanco.

—No es para tanto —respondió Sally.

—Vamos a comer, no tiene malas intenciones —añadió.

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