Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 64: Mañanas destrozadas

Deslizando mi mano sobre las sábanas para buscar a mi ángel, sentí que mis labios se fruncían al no sentirla ni la calidez que su cuerpo debería haber dejado en la cama.

Una inquietante sensación de vacío se instaló a mi lado, las sábanas frías en marcado contraste con el calor persistente de la no...