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Asistente personal

Sentada al otro lado de la mesa frente a Damien Jaeger esta mañana se sentía más intenso de lo normal, porque Damien Jaeger ya no era mi esposo distanciado, sino mi jefe a partir de hoy.

—Te ves encantadora hoy, Mélie —me halagó Natalie—. Me encanta el look profesional. Sonreí y le dije —gracias. L...