Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 35

Mis ojos se sentían ligeros y se abrieron, solo para mirar un techo blanco y escuchar sonidos de gente conversando.

—¿Sang?— escuché que llamaban mi nombre y miré a mi lado para encontrar a Caleb mirándome con preocupación en su rostro.

—¿Sang, estás bien ahora?— preguntó y sostuvo mi mano mientra...