¡Me lo prometiste, Alfa!

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¡Esto es increíble! Otra loba me ha dejado plantado y ha desaparecido.

Esto sucede con demasiada frecuencia como para seguir ignorándolo. Cada vez que intento tener una cita con una mujer, cambia de opinión en el último minuto. Algunas incluso dejan la manada con sus familias por miedo a la represión de la familia Alfa por rechazarme.

Y esta vez es Louise, la hija del jefe guerrero. Aquí estoy, pensando que estaba enamorada de mí. Era una buena pareja para mí y por un momento esperé que resultara ser mi compañera destinada en tres años cuando cumpla veintiuno. Louise es la única mujer que ha llegado a mi cama. Nuestro sexo fue maravilloso, ella era muy experimentada y me mantuvo activo toda la noche.

Solo ahora entiendo por qué mi Beta está constantemente persiguiendo hembras y tiene un apetito insaciable por el sexo. Desde que tenía 16 años, Jace ha tenido muchas citas y aventuras de una noche, con lobas incluso peleando por entrar en su cama. Cuando habla de sus experiencias, solo puedo escuchar con envidia.

Verás, yo también soy bastante guapo, me lo han dicho muchas veces. Mis rasgos de Alfa contribuyen enormemente a mi apariencia masculina, el gimnasio refina mi apariencia muscular. Mis mechones rubio-castaños hasta los hombros, que ato en un moño, muestran bien mi cuello musculoso. A menudo veo las miradas deseosas que las lobas me lanzan, pero por alguna razón, simplemente no puedo lograr que salgan conmigo, y mucho menos que lleguen a mi cama.

Hasta que Louise vino ansiosamente a mi apartamento. Pero ahora incluso ella ha desaparecido, pero por su cuenta. La diferencia es que mis admiradoras anteriores se fueron con sus familias enteras. ¿Por qué haría eso Louise después de nuestra aventura impresionante? Y ella había prometido regresar la noche siguiente, así que cuando dejó mi apartamento no tenía planes de desaparecer. Esto huele a crimen. ¿Es su caso diferente de los anteriores?

—Oye Romero, no estés constantemente preocupado. El Alfa y mi padre lo resolverán. Tienen años de experiencia manejando casos como este—. Mi Beta me da una palmada en la espalda amistosamente y se sienta a mi lado. —¿Por qué no te tomas el día libre de la universidad hoy? Estoy seguro de que no lograrás nada. Toda la situación te está estresando y deberías ir a casa y descansar un poco.

Sacudo la cabeza con autocompasión.

—Eso es precisamente, necesito una distracción. Solo en mi habitación, me vienen a la mente todo tipo de escenarios apocalípticos— le digo. —Dime honestamente, Jace, ¿qué piensas de todo esto? ¿Crees que Louise se fue por su cuenta o piensas, como yo, que aquí hay juego sucio?

Jace se pasa la mano por el cabello varias veces como si estuviera considerando cuidadosamente su respuesta. Esto es delicado, sé que algunos en la manada creen que estoy maldito porque mi padre abandonó a una amante insatisfecha cuando conoció a mi madre, su compañera destinada. Aún así, otros piensan que solo debería esperar a que la Diosa Luna me arroje a mi destinada en el regazo.

Pero me estoy desesperando.

Quiero vivir una vida sexual lujosa como cualquier otro lobo soltero, cumplir todos mis sueños ardientes antes de que sea el momento de tomar el relevo de mi padre y aceptar mis responsabilidades. Como mis amigos, quiero divertirme un poco antes de comprometerme con una compañera. Además, necesito tener suficiente experiencia para satisfacer a mi compañera en la cama. Y después de la increíble experiencia con Louise, Dios, realmente necesito tener más sexo. Con esta resistencia, puedo disfrutarlo por mucho tiempo, si tan solo pudiera encontrar una mujer dispuesta a compartir mi cama. Y ahora que Louise también se ha ido, me estoy quedando sin opciones.

—Para ser honesto, creo que hay más en juego aquí. Muchas chicas te desean, pero no se atreven a acercarse por miedo a meterse en problemas. Así que no depende de ti— comienza con cautela. —Pero las pocas a las que les pediste una cita aceptaron al principio. Solo más tarde se echaron atrás. Y después de eso, no querían tener nada más que ver contigo, en algunos casos, sus padres decidieron separarse y asentarse en otra manada. Todo de la misma manera. Aquí hay más que una maldición u otra tontería.

Asiento varias veces; yo también había hecho este análisis.

—Lo más extraño es que cuando mi padre, el actual Beta, las interrogó antes de que se fueran, mantuvieron la boca cerrada— continúa Jace. —En algunas de ellas, sintió un miedo profundo, como cuando alguien está a punto de perder la vida. Sospecha que están amenazadas y por eso permanecieron en silencio. Pero ¿quién haría eso y por qué? No tienes enemigos en la manada.

—Estás hablando mi idioma. Realmente no hay nadie en quien pueda pensar que tenga algo en mi contra. Y también le pregunté a mi padre si dejó algún corazón roto cuando aceptó a mi madre como su compañera destinada— digo con cansancio.

—¿Cuál fue su respuesta entonces? Porque esa sería la única razón para tu mala suerte con las mujeres.

—Negó rotundamente todas esas sospechas. No era un santo en esos días, era demasiado guapo para eso. Pero siempre dejó claro que solo su compañera destinada podría convertirse en su Luna. Lo proclamó alto y claro para todos— suspiro.

Estoy seguro de que esto no es noticia para Jace, su padre debe haberle explicado esto ya.

—Tengo una idea. ¿Por qué no ponemos una trampa? Podemos pedirle a una loba que nos ayude. Tendrá que aceptar una cita contigo y la vigilaremos desde ese momento. Incluso le pondremos un micrófono oculto para grabar cualquier conversación que tenga después de ser vista contigo.

Inclino la cabeza, sorprendido por esta propuesta. ¡¿Cómo no se me ocurrió antes?!

Con el ánimo en alto, salto y le doy un abrazo de hermano.

—Sí, eso es. Podemos resolver esto nosotros mismos en lugar de depender de mi padre. Y esta idea es sublime. Discutamos el plan más a fondo después de la reunión de la manada—. Jace sonríe, ahora que mi estado de ánimo ha mejorado, puede respirar aliviado.

Agarro mi mochila y juntos nos dirigimos al edificio de la escuela, listos para asistir a clases...