Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 62

—Dime que eres mía—demandó mientras sus dientes rozaban la punta de mi pezón, dejando escapar un gemido de mi boca por la sensación. Su voz estaba cargada de posesión mientras su mano se deslizaba entre mis piernas, provocándome con un toque que era a la vez suave y rudo.

—Soy tuya—susurré, mi cuer...