Hacer las paces
A la mañana siguiente me desperté y me dirigí a la cocina para comer algo. Cuando llegué a la sala, él estaba sentado en el sofá viendo las noticias. Normalmente a esta hora ya está en el trabajo. "Buenos días", le dije mirándolo. Sus ojos estaban rojos y parecía que no había dormido nada la noche anterior. "No te ves muy bien. ¿Está todo bien?" pregunté. Él me miró con una sonrisa y dijo: "No dormí bien anoche. Estuve pensando en todas las malas decisiones que he tomado a lo largo de los años". Me senté a su lado y tomé una de sus manos. "No seas tan duro contigo mismo, eras joven y seguías los consejos de tu padre". Él apretó mi mano suavemente, como si me estuviera agradeciendo. "Tengo mucho que compensarte y quiero empezar a hacerlo hoy".
Lo miré a los ojos. "¿De qué estás hablando?" Sacó su teléfono, marcó un número y puso el altavoz. Un hombre lo saludó amablemente. "Buenos días, señor Hayes, ¿en qué puedo ayudarlo?" preguntó el hombre. "¿Recibió mi mensaje anoche? ¿Tuvo la oportunidad de conseguir los documentos que solicité?" Pudimos escuchar al hombre moviendo cosas en el fondo. "Sí, señor Hayes. Le he enviado por correo electrónico ambos documentos para que los revise y firme. Si devuelve los documentos de divorcio hoy, puedo entregárselos a la señora Hayes hoy mismo". Vaya... Supongo que el viejo Cole afectó a Ethan o algo se rompió dentro de él. Desafortunadamente, es un poco tarde para él y mi madre. "Los tendrá de vuelta en breve, gracias", respondió Ethan. Abrió su laptop y revisó su correo electrónico. Me levanté y me dirigí a la cocina. Mi estómago estaba rugiendo, así que hice huevos revueltos, tocino y panqueques de plátano.
Mientras preparaba el desayuno, me preguntaba si había tenido alguna otra relación a lo largo de los años. Espero que sí, porque mi madre ha estado muerta por más de diez años y él odia a su esposa. Espero que tenga a alguien especial en su vida, para que no esté solo, especialmente ahora que está envejeciendo. Decidí preguntarle durante el desayuno y, si no tiene a alguien, lo animaría a empezar a salir de nuevo. Tal vez saber que quiero que tenga a alguien a quien amar y que lo ame, haría más fácil para él comenzar el proceso de citas nuevamente. No quiero que esté solo, porque vi lo que la soledad le hizo a mi madre. Nadie debería tener que sufrir toda su vida por cometer un error, así que él merece vivir una vida feliz.
Le ofrecí a Ethan algo de desayuno, que aceptó felizmente, y nos sentamos a comer juntos mientras charlábamos. Esto es nuevo para nosotros, normalmente lo ignoraba si estábamos comiendo en la misma mesa. Dejé de comer y pregunté: "¿No vas a trabajar hoy?" Él se limpió la boca con la servilleta. "No, me tomé una semana libre. Quiero pasar tiempo contigo antes de que vuelvas a la escuela. También necesito hacer algunos cambios en mi vida y no puedo hacerlo con mi padre respirándome en la nuca". Asentí con la cabeza de manera aprobatoria y terminamos de comer. No sé en qué estaba pensando, pero decidí seguir su ejemplo. Volvió a su laptop y trabajó durante unos 20 minutos, mientras yo veía la televisión. "¿Quieres ir a dar un paseo con tu viejo?" preguntó. "Está bien", no tenía nada planeado para el resto del tiempo que iba a estar en la ciudad, así que un paseo sonaba bien.
Saqué el tema de las citas mientras comíamos. Podía notar que no esperaba que le preguntara sobre eso, pero no me detuvo. "¿Tienes a alguien especial en tu vida? Me preguntaba, porque nunca has mencionado a nadie en el pasado". Terminó de comer la comida que tenía en la boca y dijo: "No, cariño, no tengo a nadie. ¿Por qué me preguntas esto de repente?" Le sonreí. "Mamá ha estado muerta por más de diez años y sé que ella querría que tuvieras a alguien que te ame tanto como ella lo hizo. Además, vi lo que la soledad le hizo a ella y no quiero que eso te pase a ti también. Creo que deberías empezar a salir, especialmente ahora que te estás divorciando. Esta es tu oportunidad de empezar de nuevo y encontrar a alguien a quien amar y envejecer juntos. Hay muchas mujeres solteras y hermosas en el club de campo que estarían encantadas de salir contigo". Él rió y negó con la cabeza.