Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 20

Cuando Erik estalló, lo sentí de pies a cabeza. Cada fibra de mi ser se apretó, se relajó, respiró y lo absorbió. Se puso rígido y bajó la cabeza justo a tiempo para ahogar mi grito de placer con su boca.

Lo que no pudo haber sido más de unos segundos se sintió como una eternidad de él hinchándose ...