Capítulo 1
Había estado practicando para la entrevista, así como sus habilidades culinarias. La entrevista tenía que realizarse en dos días. Estaba bastante nerviosa.
"Ayzel, ¿todavía estás despierta?" La señora Khan la sorprendió de repente en la cocina a altas horas de la noche.
Ella le sonrió tímidamente. Todo el orfanato estaba sumido en el silencio, el mismo orfanato que solía estar lleno de ruido y juegos de niños huérfanos inocentes.
Ayzel también era huérfana. Hace 22 años, su madre la dio a luz aquí en este orfanato. Fue una noche trágica.
"Solo estoy terminando de recoger todo," respondió inocentemente.
La señora Khan solo se rió. Se acercó a ella, puso sus manos sobre los hombros de Ayzel y la tranquilizó.
"No estés nerviosa, hija mía. InshaAllah serás seleccionada para el trabajo y serás independiente. Nadie puede resistirse al sabor de mi ángel."
Las palabras de la señora Khan le dieron algo de valor. Conseguir un trabajo era muy crucial para ella ahora. Ya había pasado el límite de edad. Nadie mayor de 20 años puede quedarse en el orfanato. Solo por la petición de la señora Khan, la autoridad le había permitido quedarse aquí, pero solo por unos meses más. Luego tendría que dejar el lugar.
Por casualidad, nadie la adoptó. Su amiga también consiguió un trabajo y se fue de allí.
Ayzel ya estaba trabajando en una cafetería, pero el salario era muy bajo. Y con ese trabajo, no podía permitirse otros gastos como el alquiler, las facturas, los comestibles, etc.
2 días después
Ayzel y su amiga Sana estaban caminando por la calle. Hoy era el día de la entrevista. Sana decidió acompañarla. Decidieron ir en autobús. Mientras esperaban el autobús en la parada, la atención de Ayzel fue captada por un mendigo. Era un anciano en una condición muy miserable, pidiendo una moneda. Su corazón suave e inocente no pudo ignorarlo. Revisó su bolso. Solo había un billete de cien pesos dentro.
Y sin pensarlo dos veces, le dio el último dinero que tenía al pobre mendigo. Los ojos del pobre hombre se llenaron de lágrimas y dijo,
"Ayzel, ¡chica, qué estás haciendo!" exclamó su amiga.
"Está bien. Él lo necesita más que yo."
Razonó.
Sana solo sacudió la cabeza. "¿Y cómo vas a pagar tu boleto de autobús?" le preguntó con los ojos entrecerrados.
Ayzel se mordió los labios con nerviosismo.
En ese mismo momento, llegó el autobús. Sana la agarró de la mano y ambas subieron al autobús. Sana pagó también el boleto de Ayzel. Durante todo el viaje, le dio una charla sobre que esos mendigos no son lo que parecen y todos sus trucos y engaños. Ayzel solo le sonrió. Ella todavía creía en ayudar a los demás.
Poco sabía ella que este acto de bondad le costaría muy caro en el futuro.
Tan pronto como el autobús desapareció de la vista del mendigo, él sacó el último modelo de iPhone y llamó a alguien.
"Finalmente, encontré el peón perfecto," le dijo a alguien. Una sonrisa malvada se dibujaba en sus labios.
En el lugar de la entrevista, Ayzel estaba rezando muy fuerte en su corazón. Los otros competidores tenían mucha más experiencia que ella.
Ahora estaba sentada frente al comité de selección. El restaurante tenía un gran renombre.
"Señorita Ayzel, entonces nunca asistió a ningún instituto culinario ni ha hecho ningún curso de cocina." El gerente le preguntó en un tono muy crítico, sosteniendo su currículum.
"Ummm... sí. La mayoría de las cosas las aprendí por mí misma. Pero puedo hacer cualquier cosa y desarrollar nuevas recetas. Aprendo muy rápido." Intentó ganar la situación a su favor.
"Su experiencia laboral tampoco cumple con nuestros requisitos." comentó una mujer.
"Actualmente trabajo en una pequeña cafetería. Les he pedido muchas veces que lancen nuevos productos. Pero siempre se negaron. Puedo probarlos aquí. Y les aseguro que el resultado será sobresaliente. Han probado mi cocina. Soy muy apasionada por la cocina." Al final, tragó saliva con fuerza.
Ya habían probado su comida y estaban impresionados entonces. Pero ahora algo no estaba bien.
"Señorita, este restaurante tiene un nombre. Y estamos buscando un chef con mucha experiencia. No a un novato. Apenas tienes veintitantos años. Lo siento por ahora."
El hombre le devolvió su currículum. Ella lo tomó y con el corazón abatido se fue de allí.
Las habilidades no siempre importan. A veces, las etiquetas y las referencias funcionan, sin importar lo bueno que seas en tu trabajo. Y esa realidad se hundió profundamente en el cerebro de Ayzel ahora. Era la tercera vez que la rechazaban por las mismas razones. Cualquiera que probara su cocina una vez se enamoraba locamente de ella.
El día fue un desperdicio y ahora estaba trabajando en la cafetería. Con el corazón pesado, regresó al orfanato.
La señora Khan la consoló y le dijo que no perdiera la esperanza. Un día tendría su propio restaurante. La señora Khan siempre la animaba con estas palabras.
"No, señora Khan. No creo que eso vaya a suceder. Ni siquiera puedo conseguir un trabajo de chef, mucho menos ser dueña de un restaurante. Solo el dinero y las referencias poderosas funcionan. El verdadero talento de uno no tiene ningún valor. Ahora siento que todos ustedes solo elogiaban mi cocina para que mi corazón no se rompiera. No soy una buena chef en absoluto." dijo sollozando.
"No querida, eso no es verdad. Eres la mejor. No te preocupes, InshaAllah tu futuro es brillante y próspero, lo dice mi corazón." La señora Khan la motivó. Después de esto, ambas se fueron a sus respectivas habitaciones.
Los motores de los autos rugían en todo el lugar. Los vítores y el apoyo a su persona favorita estaban creando un nivel de emoción sin precedentes. Se podía sentir el trueno metafórico. Pero solo un nombre dominaba en la multitud "¡ZAIN, ZAIN, ZAIN!"
1...
2...
3...
¡Vamos!
Y la carrera comenzó.
Ambos corredores luchaban con uñas y dientes para lograr la victoria.
Pero el hombre llamado Zain ganó la carrera. Con mucho menos esfuerzo.
Su competidor quedó muy atrás a una gran distancia.
Pronto la gente se reunió alrededor del escenario. Ahora el trofeo iba a ser entregado a Zain.
El trofeo estaba adornado con piedras y cristales caros. Un trofeo de ensueño que existía en la realidad.
¡Boom!
El trofeo fue aplastado y destruido por un disparo, disparado por nadie más que Zain Skindar. Todos quedaron boquiabiertos por su acción.
Sonriendo, se dirigió a su auto. Su primo Burhan lo siguió.
"¡¿Qué demonios, hermano?! La última vez rompiste el trofeo de la misma manera porque no pudiste conseguirlo. Y ahora, incluso después de ganarlo, todavía lo destruiste. ¿POR QUÉ?"
Su primo preguntó preocupado, su mente también estaba a punto de explotar con la acción de Zain.
El año pasado Zain perdió debido a un juego sucio por parte del otro lado, que no pudo descubrir a tiempo. De lo contrario, nunca pierde.
Zain se rió. Pero sus siguientes palabras valían la pena recordar.
"Zain Skindar no gusta de victorias dadas en bandeja. Y sobre la última vez, déjame recordarte." hizo una pausa y luego dijo, "Las cosas que no puedo conseguir, las arruino, quemo y destruyo. Y las arruino de tal manera que no pueden ser poseídas por nadie más. Ni siquiera quedan para ser usadas por alguien más. Si no son mías, no son de nadie."
Así es Zain Skindar, el mayor capo de la mafia del país. El magnate de negocios multimillonario de día y de noche todos sus actos oscuros tienen lugar.
La palabra despiadado es muy baja para definir sus atrocidades. Odia solo dos cosas, la traición y el perdón.
La palabra "lo siento" no existe en su vida. Según él, lo siento es una palabra patética. No debe haber espacio para una segunda oportunidad. Cada error merece un castigo. Y el castigo que él da está más allá de la imaginación, a menos que alguien lo enfrente.
Nunca perdona ni olvida.
Nunca ha pronunciado la palabra lo siento. Porque siempre hace las cosas con perfección. Y espera lo mismo de las personas que trabajan bajo su mando.
Oscuro
Despiadado
Implacable
Cruel
Asesino
Pecador es.
Las únicas personas bajo su amor y cuidado eran su familia.
Y en el futuro, su fuego va a chocar con un alma inocente.
O ella convierte su fuego en hielo o se quema por él.
Solo el tiempo lo dirá.
Solo el tiempo.