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Capítulo 443: No hay lugar para una mujer

Olivia

—¿Dianna?

El nombre escapó de mis labios antes de que pudiera detenerme. La puerta se había abierto, revelando a una mujer mayor con mechones de cabello gris enmarcando su rostro. Llevaba un par de overoles cubiertos de pintura, debajo de los cuales vestía un suéter naranja igualmente manch...