Read with BonusRead with Bonus

Capítulo veinticuatro

Perdí la esperanza.

El universo estaba en contra de todo lo que hacía.

El Dios al que había rezado tantas veces no se encontraba por ningún lado, obligándome a creer que un poder superior no existía. No había creador. No había un hombre sentado en una nube cuidando a las personas que caminaban...