Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 38

Beau apenas podía ver lo suficiente como para guiarlos hacia la cama. Retrocedió tambaleándose, aún sosteniéndola contra su pecho, su miembro todavía medio erecto y enterrado en su calor. Cuando sus piernas chocaron contra el colchón, Dana deslizó sus piernas por su cuerpo mientras él apartaba la co...