Read with BonusRead with Bonus

128

Al día siguiente, Casina se despertó y se encontró sola. Parpadeó, tratando de recordar dónde estaba. Cuando las telarañas se despejaron un poco, dio un fuerte suspiro y se movió para levantarse. Una mirada a las puertas de vidrio al otro lado de la gran habitación evidenció otro día cálido y solead...