Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 29 ¡Estaba aterrorizada, hermana!

Annabel ya estaba vestida, llevaba un vestido corto de color plateado, con unas botas largas y elegantes de color negro, casi hasta las rodillas. Se había parado frente al espejo decorado con muchos tipos de pegatinas. Estuvo allí unos minutos admirándose. Admiraba la perfecta criatura reflejada en ...