Read with BonusRead with Bonus

Capítulo doce

Cuando estoy sobre la mesa, con las piernas temblando, aún parcialmente cerradas, él se recuesta en su silla, con una sonrisa amenazante que se dibuja en las comisuras de su boca.

La pura dominancia que emana es un calor que se hunde en mi núcleo, hasta que estoy jadeando y confundida mientras frot...