Read with BonusRead with Bonus

La puesta de sol

Paige

Frunció el ceño y me miró con los ojos entrecerrados, confundido.

—Así que no sabías que eras un hada. Interesante. —Me agarró la mano y caminamos cerca del hermoso lago; la cabaña seguía ardiendo un poco, pero la vida silvestre parecía no importarle. Los pájaros seguían cantando—. No sé de q...