Read with BonusRead with Bonus

Cuarenta y siete

Puca se dio la vuelta, entrando en la estrecha cabina de la ducha. Miró a Lola, extendiéndole la mano mientras ella lo miraba.

Sus ojos se desviaron hacia el agua corriendo y luego de vuelta a Puca. Tenía miedo de lo que podría pasar en la ducha mientras sus dedos de los pies se hundían en la suave...