Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO CUARENTA Y CUATRO

DAMIEN

Mi mirada nunca dejó de estar en Emilia durante toda la reunión, y seguía preguntándome por qué demonios estaba aquí. Estoy seguro de que aparece en mi vida a propósito para molestarme, pero ¿qué gana ella al verme desquiciado? Solté un suspiro frustrado antes de dirigir mi mirada al gerente...