Read with BonusRead with Bonus

10.

El cambio fue tan agonizante como la primera vez que lo hizo cuando tenía 10 años. La sensación de sus huesos rompiéndose solo para realinearse es tan desagradable como suena. Le tomó la última gota de fuerza en su cuerpo no llorar del dolor, no podía llorar frente a estas personas, no ahora. Una ve...