Read with BonusRead with Bonus

Capítulo veinticuatro

Athena y Alexia estaban jugando en la consola cuando de repente ella habló:

—Lexi, vamos al campo de tiro.

Alexia pausó el juego para mirar a su amiga:

—¿Campo de tiro? ¿Qué te hizo pensar en eso? ¿Y cómo estás tan segura de que hay un campo de tiro en la manada?

—Lo hay. Ace me lo dijo. Los gue...