Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 22

Después de que esa mujer loca se fue, me quedé boca abajo en la cama durante mucho tiempo—después de haberme vuelto a poner la ropa—mirando ese collar, un collar que por alguna razón no sabía por qué demonios no había podido soltar.

Tal vez esto era la señal de que tenía que hablar con ese bastardo...