Read with BonusRead with Bonus

Una buena razón

—¿Tocas? —pregunto impresionada por su confesión y petición.

—Soy mejor que Mozart —responde Filipe con esa sonrisa de pícaro.

Lo empujo con mi cuerpo y, como resultado, quedamos muy cerca. Filipe me mira fijamente y yo le devuelvo la mirada con intensidad. Intercambiamos miradas hasta que Filipe ...