Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 25

Isaac se arrodilló en la tierra, sin sentir el barro en sus manos, la brisa fresca en su rostro—ni siquiera sintiendo su propio cuerpo—mientras se arrodillaba allí, entumecido, inclinado sobre la tumba de su hermano. Lloró y lloró junto a los montículos de tierra, con las manos en carne viva de habe...