Capítulo 7 - Hielo
Punto de vista de Natasha
Escuché varios golpes en la puerta antes de que se abriera.
Elyse entró en la habitación, lo que me hizo fruncir el ceño.
¿Qué está haciendo aquí?
Quiero decir, ¿no estaba enojada conmigo? Me estaba mirando con odio antes, y no tengo idea de por qué.
Bueno, es porque la estrangulé... tengo que admitirlo. ¡Pero ella me provocó! Quería matarme, y no iba a quedarme ahí esperando a que lo hiciera. Quiere acabar con mi vida porque se siente amenazada de que estoy en su territorio, el escondite de su hermano, y tengo que protegerme, pero perdí el control. Y si no fuera por la llegada de Valerian... no quiero pensar en las posibles cosas que podría haberle hecho.
Observé a Elyse mientras se sentaba en la silla en la esquina de la habitación.
Me pregunto de qué hablaron ella y Valerian cuando salieron de la habitación.
No es por ser entrometida ni nada, pero ¿fue sobre mí?
—Lo siento por lo que pasó —se disculpó.
La miré automáticamente.
¿Ella lo siente? ¿Por qué? Yo fui la que le hizo algo a ella.
—Es gracioso cómo te alteraste cuando eres tú la que está invadiendo... quiero decir, no invadiendo, ya que ya sé por qué estás aquí —añadió.
Fruncí el ceño mientras inclinaba la cabeza. —¿Por qué?
—Eres la compañera de Valerian, ¿verdad?
Sacudí la cabeza rápidamente ante sus palabras. —No, no lo soy.
Ahora es su turno de fruncir el ceño. —Eso es lo que él dijo.
—No lo soy —repetí.
—¿Qué quieres decir? Es literalmente la razón por la que estás aquí. Eres la compañera de Valerian.
Fruncí el ceño porque su tono es tan insistente, y me está molestando.
¡Ja! Así que no soy la única a la que Valerian está engañando, ¿eh? ¿Ahora les dice a su familia que soy su compañera? ¿Son sus aliados en engañarme?
En serio, no sé cuál es su agenda detrás de decirme una mentira como que soy su compañera, ¿quizás vengarse del hecho de que intenté matarlo? ¿O le parece divertido jugar conmigo y tenerme bajo su control? Está muy mal por eso.
—Eres su compañera, Natasha —repitió Elyse.
Ahora sabe mi nombre, ¿eh?
Cerré los ojos profundamente y solté un suspiro antes de abrirlos. —Por favor, no lo voy a repetir.
Elyse se levantó de la silla y se sentó a mi lado. Me tomó la mano, y no pude evitarlo porque fue rápida.
¿Qué está haciendo?
Cerró los ojos y acarició mi mano, y no pude hacer nada al respecto porque su agarre comenzó a apretarse alrededor de mi mano, así que solo la miré extrañada.
Pasaron un par de segundos, y finalmente abrió los ojos.
—Es verdad —afirmó.
Me mordí el labio inferior mientras mi corazón comenzaba a latir más rápido de lo normal.
—¿Qué es? —pregunté.
Repetidamente maldije en mi mente cuando sentí lo ansiosa que estaba mientras esperaba su respuesta. Aunque ya tengo una idea de lo que va a decir, realmente no puedo evitar estar tan nerviosa, y mi ansiedad está por las nubes. Y, supongo, simplemente no estoy lista para escucharlo.
—Tú y Valerian son compañeros —afirmó Elyse con firmeza, como si lo que dijo no pudiera estar mal de ninguna manera.
Tragué saliva con fuerza. —¿Cómo puedes estar tan segura?
—Puedo ver la verdad —respondió.
—Mi habilidad especial es que puedo ver la verdad —añadió cuando vio lo fruncido que estaba mi ceño por su respuesta.
Mi corazón latía con fuerza en mi pecho que casi podía escucharlo.
Si realmente puede ver la verdad al tomar la mano de alguien, entonces es verdad... Valerian y yo realmente somos compañeros.
No, no puede ser.
Respiré hondo.
—¿Todos los vampiros tienen una habilidad especial? —pregunté, tratando de cambiar el tema.
Necesito saber cosas sobre su especie porque necesito encontrar una falla o al menos un defecto en Valerian para poder planear su muerte de inmediato, ya que sus mentiras están empezando a meterse en mi cabeza.
Es demasiado creíble y no puedo luchar contra ello por más tiempo si continúan diciéndome cosas como esta.
—No, solo aquellos que pertenecen a la familia noble —respondió.
Así que, tenía razón.
Valerian Fenrir proviene de una familia de vampiros de alto rango.
Eso explica sus habilidades.
Y ahora, no puedo decir que Elyse está mintiendo sobre lo que acaba de decir porque es la hermana de Valerian, así que también tiene una habilidad especial.
Gemí mentalmente.
¿Cómo me metí en este lío?
Quería ir a casa y preguntar a las brujas que conocía mi padre para confirmarlo, pero sabía que no podía hacer eso.
Mi padre me desheredará oficialmente si se entera de que no logré hacer lo que él quería.
Me lo dejó claro.
Varias veces.
¿Qué hago ahora?
—Sabes, realmente me preguntaba por qué estás aquí... quedándote aquí. Pero no es solo eso; ¿por qué Valerian te dejó quedarte aquí? —preguntó Elyse, lo que me confundió.
—¿Qué quieres decir?
—Esta es una casa donde él vivió con...
Elyse no pudo terminar su frase cuando la puerta se abrió de repente y Valerian entró.
Quiero decirle que continúe con lo que estaba diciendo, pero no es posible porque el diablo acaba de llegar.
Me senté derecha y me arreglé.
Por otro lado, Elyse se levantó y caminó hacia el sofá en la esquina de nuevo, pero vi que Valerian le hizo un gesto para que saliera de la habitación, y ella obedeció sin decir nada.
En el momento en que Elyse cerró la puerta y se fue completamente, mi corazón comenzó a latir rápido de nuevo.
Estoy sola en el mismo lugar con Valerian, y siento que me estoy asfixiando, especialmente después de lo que Elyse me acaba de decir.
Me niego a creer que él es realmente mi compañero. No, porque es más como que me niego a aceptar que él es mi compañero.
No lo es. No puede ser. No.
Es despiadado, y no quiero que sea mi compañero.
Alguien allá afuera que sea compasivo, amable y gentil es mi compañero. Y lo más importante, un hombre lobo, de mi especie.
—¿Puedes leer mentes? —preguntó Valerian.
Sonaba tan directo como si buscara mis respuestas con desesperación.
Me mordí el labio inferior.
No sabía que podía leer mentes porque no lo expresé vocalmente.
—Vi la forma en que miraste mis ojos antes. Puedes leer mentes —afirmó.
Tragué saliva.
Recuerdo cuando me dijo que tuvo dificultades cuando intentó leer mi mente, y vio lo mismo cuando intenté leer su mente.
Pero, no puede saber que puedo leer mentes porque eso solo hará que haga preguntas a las que ni siquiera yo tengo respuestas.
—Lo cual es extraño porque los hombres lobo no pueden leer mentes —añadió mientras me miraba con sus ojos penetrantes—. No poseen ese tipo de habilidad porque son, de hecho... débiles.
Mi sangre hirvió con sus últimas palabras.
Corrí hacia él apresuradamente, y porque lo tomé por sorpresa, logré empujarlo contra la pared y acorralarlo.
Apreté los dientes y lo miré con ojos tan afilados como dagas. —Puedo desordenar tus órganos usando solo mis dientes.
Valerian permaneció en silencio mientras sus ojos y su rostro se volvían completamente inexpresivos.
—Bastardo —escupí la palabra como si fuera veneno.
Vi cómo la mandíbula de Valerian se tensó. En un abrir y cerrar de ojos, logró cambiar nuestra posición.
Mi corazón se detuvo cuando, de repente, fui yo la que quedó acorralada en la pared con ambas manos de él a mis lados.
—Fiera —susurró—. Justo como me gusta.