Read with BonusRead with Bonus

La vida sin ti

De pie, agarró a Kore y la acercó a ella. Apep la miró con hambre.

—Qué niña tan poderosa. Ven a Apep.

Evie la apretó más fuerte.

—¡NO!

Él la miró con furia.

—Deja a la niña.

Evie respiró hondo.

—Está bien.

Sentando a Kore, se inclinó y le habló.

—Cariño, ve a jugar junto a las rosas.

Feli...