Read with BonusRead with Bonus

La mascota del profesor

—Eres imposible —gruñó Tali, exhalando ruidosamente por la nariz.

—¿Porque no me importan tus sentimientos? Pobrecito —se burló Dark, cerrando brevemente los ojos mientras sumergía los hombros bajo la superficie. Ni siquiera intentó ocultar su gemido cuando los músculos se relajaron.

—Infantil... ...