Read with BonusRead with Bonus

Capítulo ciento dos

Dash llamó de nuevo durante la cena esa noche desde Roma. Ella contestó la llamada, sintiéndose abatida y sin ganas de discutir con su madre o hermana sobre tomar la llamada. Luego se levantó y dejó la mesa.

—Hola, Dash. ¿Querías algo? —preguntó con una voz que le sonaba apagada incluso a ella mism...