Read with BonusRead with Bonus

Atrapado sexual

Chantajeada.

Kathleen yacía débilmente en su cama. Ya era de noche.

Al menos ese imbécil tuvo la amabilidad de llevarla de vuelta a casa.

«Imbécil», maldijo por enésima vez.

Recordó lo que le dijo en cuanto salió del coche.

Le había amenazado con hacerle pagar por lo que le hizo.

Él se había reído y...