Read with BonusRead with Bonus

Capítulo noventa y dos

—Mira, Emma... Lo siento por lo de Michelle —dijo él—. Solo vino a discutir algunos asuntos de trabajo.

Emma lo enfrentó, decidida a no dejar que sus sentimientos se reflejaran en su rostro.

—No me importa —dijo.

—Parece que sí te importa —respondió él.

—Pues no me importa. No te creas tan impor...