Capítulo 9: Hablar con mis padres
(Desde el punto de vista de Allie)
Anoche con Jack fue una de las mejores noches de mi vida. Nos sentamos y hablamos durante horas. Tuve que llamar al Tío Buck y avisarle que llegaría tarde a casa. Despedirme de Jack anoche dejó un vacío en mi corazón. Siento que algo me falta. Aunque solo lo he visto dos veces, es como si no pudiera vivir sin su presencia. Nunca escuché a una de mis amigas decir que se sentían así, que no podían vivir sin su novio. Tal vez debería ir a su casa más tarde y sorprenderlo. No sé si sus guardias me dejarán pasar por la puerta, pero lo intentaré.
He decidido que hoy es el día en que voy a preguntar a mis padres sobre el préstamo para la tienda. Ya hablé con el Tío Buck, y dijo que solo quiere terminar en los establos y luego podemos hacer una videollamada con Mamá y Papá. Fui a la cocina a poner la tetera para que cuando el Tío Buck terminara, pudiera tomar una taza de café caliente. La tetera acababa de hervir cuando el Tío Buck entró en la casa.
—Hmmm. ¿Vas a prepararnos un poco de café, querida Allie? —pregunta el Tío Buck, luciendo muy contento.
—Sí, tío. Pensé que podríamos tomar una buena taza de café caliente mientras hablamos con Mamá y Papá —Vertí el agua en las dos tazas que había preparado para nuestro café.
—No olvides esas deliciosas galletas que compraste el otro día —dice el Tío Buck, antes de desaparecer por el pasillo para lavarse.
Me río del Tío Buck. Esas galletas son deliciosas. Nuestra caja está casi vacía. Creo que debería pedirle a Sasha más de esas galletas, y tal vez probar algunos de sus otros sabores también. Afortunadamente intercambiamos números, así que podría llamarla más tarde.
Corrí rápidamente a mi habitación para buscar mi portátil y configurarlo en la mesa de la cocina. Cuando el Tío Buck se sentó a mi lado, llamé a Mamá y Papá por videollamada.
—Hola, cariño. ¿Cómo has estado? Estoy tan feliz de verte —Puedo ver la emoción en el rostro de mi papá cuando me vio por la cámara.
—Hola, papá. Yo también estoy muy feliz de verte. ¿Dónde está mamá? —Notando que no está sentada junto a papá.
—Aquí está ahora —dice papá mientras levanta el brazo para que mamá pueda sentarse a su lado mientras descansa su brazo sobre sus hombros.
—Hola, cariño. Mírate. Estás radiante —El rostro de mamá se iluminó en el momento en que me vio.
—Hola, mamá. Los he extrañado mucho. ¿Cómo están las cosas? —Siento un nudo en la garganta al darme cuenta de cuánto los he extrañado.
—Todo va muy bien. Es tan tranquilo sin ti —Puedo ver la tristeza en sus ojos y siento las lágrimas acumulándose en los míos. Trato de no parpadear, porque sé que las lágrimas que se acumulan en mis ojos caerán por mis mejillas si parpadeo ahora.
—¡Aww! El Tío Buck y yo tenemos algo que discutir con ustedes. Tengo buenas noticias. Finalmente descubrí lo que quiero hacer —El rostro de papá se ilumina.
—Eso es genial. Estoy muy orgulloso de ti, cariño.
—Tienes tantos talentos, estoy segura de que te irá bien en lo que hagas —dice mamá, luciendo muy orgullosa de mí.
—Gracias, mamá. Cuando estuve en el pueblo el otro día, encontré una pequeña tienda en venta y pensé que sería una gran tienda de regalos/cafetería con todo hecho a mano, así que me preguntaba si podrían ayudarme con un préstamo y les pagaré tan pronto como el negocio comience a despegar.
—Creo que a Allie le iría bien aquí en el pueblo porque no tenemos una tienda de regalos y también la ayudaré a renovar la tienda.
Estuvimos en videollamada con mis padres por un rato, tratando de venderles mi presentación de negocios. Mamá y papá pensaron que era una gran idea, pero se dieron una mirada preocupada y supe que algo andaba mal.
—Nos encantaría ayudarte, cariño, pero el dinero está un poco ajustado en este momento —dice mamá, puedo ver en su expresión que está desolada.
—Tenemos algo de dinero ahorrado para nuestra jubilación. No es mucho. Solo será la mitad del monto de la tienda. Usamos casi todos nuestros ahorros para tu matrícula universitaria y tu coche para ir a la universidad —Al escuchar a papá decir eso, mi corazón se hundió en el estómago. Ahora me siento mal por pedirles dinero. Trabajaron tan duro para darme todo lo que siempre he querido y ahora quiero tomar sus últimos ahorros.
No quiero tomar el único dinero que tienen ahorrado, así que les dije que mejor se quedaran con su dinero. Intentaré hacer otro plan para conseguir el dinero. Después de todo, tengo un título en negocios.
Hablamos un poco más por Skype con mis padres y luego llegó el momento de despedirnos. ¿Cómo iba a conseguir esa gran suma de dinero? Solo tengo un poco de dinero que ahorré durante los trabajos de niñera que hice los fines de semana cuando estaba en la universidad. Pensé que conseguiría el dinero para comprar la tienda de Mamá y Papá y usaría mis ahorros para comprar el inventario que necesitaba para llenar la tienda.
Hoy no es mi día. Tal vez me emocioné demasiado. Debería pensar en conseguir un trabajo y ahorrar, pero para cuando ahorre, la tienda ya se habrá vendido. «Ugh». No quiero pensar en eso ahora.
Le dije al Tío Buck que quería sorprender a Jack con una cena romántica esta noche y que no me esperara despierto. El Tío Buck me dio una sonrisa torcida.
—Alguien está enamorada.
No lo negué, porque es la verdad. Subí a darme una ducha rápida y vestirme. Esta noche solo me voy a poner un vestido largo negro de material de camiseta. Era un vestido sencillo pero hermoso, con tirantes finos que pasaban por los hombros y se cruzaban en la espalda. También voy a usar una chaqueta de mezclilla, porque podría hacer frío. En cuanto a los zapatos, solo me voy a poner un par de sandalias negras. Rápidamente me ato el cabello en un moño desordenado y me pongo un poco de sombra de ojos. Estoy haciendo un ojo ahumado ligero. Siempre queda bien con mis ojos marrón oscuro, y por último, mi nuevo perfume y unos grandes pendientes de aro plateados.
Me despido del Tío Buck y me dirijo a la casa de Jack. Espero que los guardias me dejen entrar, o que él esté en casa esta noche y no en algún viaje de negocios.
Cuando llegué a la gran puerta de la casa de Jack, no había guardias en la puerta y la puerta estaba abierta. Creo que solo entraré despacio por si alguien intenta saltarme o algo así. Al acercarme a la puerta principal de la casa, pude ver el coche de Jack en la entrada, pero no había nadie a la vista. La puerta del coche está abierta, pero Jack no está en él. Creo que pudo haber entrado rápidamente a la casa y dejó la puerta abierta. Aparco mi coche al lado de la casa donde está el estacionamiento techado y me dirijo hacia la casa. Toco la puerta principal, pero no hay respuesta. Es extraño. El otro día este lugar estaba lleno de guardias y ahora, no hay una sola persona a la vista. Tiré del picaporte para ver si estaba desbloqueado y, para mi sorpresa, lo estaba. Entro en la casa y cierro la puerta detrás de mí. Llamo a Jack, pero no hay respuesta. Me dirijo a su dormitorio, para ver si tal vez está allí. La puerta de Jack estaba abierta, así que simplemente entré y lo llamé, pero nuevamente no tuve suerte. Bueno, supongo que empezaré la cena entonces. Tal vez Jack regrese en un rato. Probablemente esté dando un paseo o algo así. Solo piensa en lo sorprendido que estaría si volviera a una comida casera. Miro en la gran despensa para ver qué comida tiene Jack allí. Está llena de comida. El sueño de toda chica, o mi sueño. Saqué una bolsa de macarrones de la despensa y ahora, a buscar una olla grande y una sartén. Lleno la olla con agua y la pongo en la gran estufa. Cuando el agua empiece a hervir, pondré los macarrones. Luego, empiezo a picar las cebollas. Apenas empecé a picar las cebollas, mis ojos comenzaron a llorar. Fui a buscar una toalla de cocina para secar las lágrimas. No quiero manchar mi maquillaje y arruinarlo todo, y cuando Jack me vea, pareceré un desastre. Mientras me seco los ojos, escucho la puerta abrirse, y ahí está Jack en la puerta.
—¡Oh, Dios mío! Lo siento mucho, Jack —cierro los ojos rápidamente—. Jack, lo siento mucho. Quería sorprenderte, pero...
Apenas terminé mi frase cuando sentí su dedo en mi boca. Me quedé allí, sonrojada, porque sabía que estaba parado justo frente a mí desnudo.
Jack toma mi mano lentamente y la pone en su pecho. En los pocos segundos que pude verlo antes de cerrar los ojos, pude ver que estaba muy musculoso con vello en el pecho. Se ve tan varonil. Solo con mi mano aquí en su pecho, pude sentir el calor en mi rostro y comencé a respirar con dificultad.
—Abre los ojos, Allie —lo escucho decir, pero los aprieto aún más, y al siguiente momento toma mi mano y comienza a moverla lentamente por sus abdominales.