Read with BonusRead with Bonus

OCHO AÑOS DESPUÉS.

—Cierra tu sucia boca, Oceana, no quiero verte cerca de Gérard otra vez, no tienes derecho a invadir su privacidad.

—Pero no fui a verlo intencionalmente —me defendí.

—No me importa. La próxima vez que te vea hacer algo así, me encargaré de ti. Eres una inútil que no puede controlar sus poderes, t...