Read with BonusRead with Bonus

67

Durante el trayecto, la mujer ocasionalmente nos miraba a Dominic y a mí en el asiento trasero a través del espejo retrovisor. Podía ver la tensión en ella, la pequeña reticencia y el arrepentimiento como si hubiera debido dejarnos allí solos. El sudor perlaba sus sienas. Sus manos se aferraban al v...