Read with BonusRead with Bonus

48

—Mia, cállate y vete a dormir.

—Está bien...

Me quedé dormida poco después, y mientras empezaba a quedarme dormida, escuché a Valentina decirle a Dante: —No podemos irnos ahora. Mírala, pobre alma. ¿Por qué tu hermano es tan imbécil?

Dante respondió algo que hizo reír a Valentina, pero no pude es...