Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 242

El sol poniente pintaba el cielo de brillantes naranjas y rosas mientras avanzábamos por la autopista. La mano de Tom descansaba sobre la palanca de cambios, rozando ocasionalmente mi muslo. El fin de semana había sido perfecto, casi demasiado perfecto. No quería que terminara.

—No puedo creer que ...