Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 258 Debería poder sobrevivir hoy

El interrogatorio en la celda seguía prolongándose.

El Capitán, en un arrebato de ira, casi me estranguló.

—¡Suéltame!— luchaba por respirar. —¡Cálmate! ¡Solo, solo escúchame!

Su agarre finalmente aflojó, sus ojos inyectados en sangre.

Tosí violentamente, jadeando por aire, colapsando en el suel...