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Cuarenta y tres

—¡Fuego en el garaje!—llamó Eva a través del enlace mental de la manada.

Eva no se molestó en ver si alguien la había escuchado y en su lugar corrió hacia el garaje para ver si había alguien allí. Estaba tan distraída por el fuego que al principio no vio la pequeña caja de cartón marrón que estaba ...