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Capítulo 26 - El presidente herido

—Entonces, tendré que despertarte.

Eso fue lo que dijo Erik, pero sí, realmente no sucedió hasta que me desperté en mi cama con la luz del sol de la mañana asaltando mis ojos.

No es que esperara que algo sucediera... bueno, para ser honesta, realmente esperaba que algo sucediera entre Erik y yo an...