Read with BonusRead with Bonus

Llévala a pasear

—¡Guardia! —rugió, haciéndome saltar. Tan pronto como lo hizo, la puerta principal se abrió de golpe. Aún jadeando contra la pared, ignoré el ruido audible cuando la puerta cedió ante la fuerza bruta, a pesar de que la había cerrado con llave la noche en que me fui a dormir.

—Alfa —dijo el guardia ...