Read with BonusRead with Bonus

Verdades duras

El día había llegado, Ash se despertó temprano y se encontró envuelta en un Micah sin camisa. Él tenía sus brazos alrededor de su torso y una pierna sobre una de las suyas, forzándola a separarlas para quedar entre ellas. Estaba sofocada por el calor, la manta y Micah, era demasiado. Tiró la manta, ...