Read with BonusRead with Bonus

Amelia y Adam: Prólogo

Átame, nunca me ates

Amelia

Algunas partes de la infancia y la vida son más difíciles que otras. Cuando crecí, no fue más que dolor y desconfianza. No mantuve mi virginidad intencionalmente porque sonara como una buena idea. Simplemente empecé a desconfiar de los hombres y de más personas en...