Read with BonusRead with Bonus

78 ¡Perdí!

No, no puedo. Debe haber una manera. Me seguía diciendo a mí mismo.

Una sombra apareció bajo la farola y vi a un hombre sin hogar con una mochila acercándose hacia mí. Se sentó en otro banco junto a mí, sacó una botella de vino y una barra de pan de su mochila y comenzó a comer. El sonido de su boc...