Capítulo 6
Punto de vista de Matthew
Salí de la fiesta justo después de Luke. Estoy siguiendo los olores de Alex y María para encontrarlos. Se adentraron en el bosque para poder hablar en privado, lejos de sus padres.
—¡Voy a matarlo! ¡Te rechazó, ¿verdad?! —oigo gritos.
—No, no lo hizo. Soy yo la que no lo quiere —responde María.
—¿¡Qué?! —Él está sorprendido.
—¿Lo rechazaste? —pregunta después de un minuto de silencio.
—No, no lo hice.
—¿Entonces por qué? —dice él.
—Yo... ¿Qué quieres que diga?
—¿Qué quieres, María? Necesitas decidir qué vas a hacer, o lo aceptas o lo rechazas porque seguir así solo te hará daño. A los dos —le digo, uniéndome a ellos.
—¿Desde cuándo lo sabes? —pregunta Alex.
—Mira, Alex, esto no es... —empieza ella.
—¿Desde cuándo, María? —la interrumpe.
—Desde mi fiesta de cumpleaños de 16 años.
—¡Así que no estás marcada pero tampoco rechazada por más de un año y medio! —comenta, sorprendido.
—¿Qué hizo para que no lo quieras? ¿Es por Lara? Él te quiere por ti. No tienes que protegerlo —le pregunto.
—Sí, no. hmm... Quiere que estemos juntos, de verdad lo quiere. Pero no puedo. No mientras siga siendo amigo de esa perra. Me jura que solo son amigos, pero yo soy su compañera. Necesito ser su prioridad. Soy su compañera, tengo que ser la primera. Exijo ser la primera. Debería haberse distanciado de ella tan pronto como supo que yo era su compañera, pero no, ¡intentó comprometerse! ¡Conmigo, su propia compañera! Le pedí que mantuviera distancia con ella y no solo se negó, ¡sino que ni siquiera debería haber tenido que pedirlo! No estoy pidiendo demasiado, solo quiero sentir que soy la única en la que piensa.
—María... Él es el futuro Gamma. Pedirle que elija entre ustedes dos es como pedirle que renuncie a su posición. Así es su lobo, como... —empieza Alex.
Ella lo interrumpe:
—¡No me importa! Yo vengo primero, incluso si tiene que renunciar a su posición. Quiero que se dé cuenta de que soy la mejor para él y la única.
—¡Está bien, está bien! Cálmate, estamos de tu lado —digo.
—¿Entonces cuál es tu plan? ¿Besarte con cualquier chico que encuentres? Porque conociendo a Luke, hay más posibilidades de que te rechace a que mantenga su distancia con Lara —dice Alex.
—No lo sé. Solo quiero que sufra tanto como yo —responde ella, vengativa.
—¿Hasta qué? ¿Uno de ustedes muera de tristeza o se vuelva loco? —dice él, presionando de nuevo.
—¡Vete al diablo, Alex! —dice antes de convertirse en su lobo y correr.
—Bueno... Ahora sabemos cuál es el problema —comenta Alex.
Suspiro:
—¡Sí, lo sabemos!
Casi ha pasado un mes desde que supimos que María y Luke son compañeros. Y nada ha cambiado. Ella sigue besándose con varios chicos y él sigue cerca de Lara. No creo que su manera de manejar el problema sea la mejor, pero ella no quiere escuchar nada al respecto.
Estamos en la biblioteca con Alex y Luke y Lara están trabajando a cinco mesas de nosotros. No puedo evitar mirarlos. Lara... ella me ignora completamente. Ni siquiera me saluda cuando hablo con Luke.
—Nos lo merecemos un poco —comenta mi lobo.
—¡Gracias, Capitán Obvio! —respondo con sarcasmo.
—Sabes que no te va a perdonar. Así que si quieres que te hable de nuevo, deberías disculparte. Pero mirarla y añorarla así no te ayudará en nada —dice Alex a través del enlace mental, sin levantar la vista y fingiendo que está leyendo.
—Estaba pensando en la situación entre María y Luke.
—¿De verdad? Porque la miras más a ella que a él —responde, escéptico.
—No me disculparé. Soy el Alfa y los Alfas no se disculpan. Ella tiene que superar eso.
—¡Esto es una tontería! ¡Le dijiste que era una zorra, no lo va a superar! —Él es realmente molesto, más aún cuando tiene razón. Le lanzo una mirada y él sonríe, sabiendo que tiene razón.
—¿Tengo que recordarte que estamos aquí para estudiar? Así que concéntrate en tu libro y no en mí. —¡Cómo me gusta tener la última palabra!
Pasa media hora y trato de mantenerme concentrado en mi libro, pero mis pensamientos siempre vuelven a Luke y Lara. De repente, ambos se levantan y se van rápidamente.
—Algo está pasando, síguelos —me ordena mi lobo.
No nos gusta darnos órdenes, pero estoy demasiado curioso para reprenderlo. Cuando me levanto, Alex también se levanta y los seguimos.
—Cálmate y concéntrate —oímos decir a Lara.
Cuando los vemos, ella tiene ambas manos en su pecho mientras él respira profundamente. Sus ojos están cerrados.
—Habla. ¿Qué pasa? —añade ella.
—Sentimos que alguien está en problemas —responde él, con los ojos aún cerrados.
—Déjame ayudarte. —Ella cierra los ojos y continúa—: Concéntrate en tu lobo, en tu instinto. Todos estamos conectados entre nosotros por hilos que forman una red a tu alrededor. Ahora sigue el hilo que te guiará hacia la persona en problemas. ¿Quién es?
—¡Compañera! —dice abriendo los ojos, bueno, los ojos de su lobo. Se transforma en su lobo y corre, y Lara lo sigue.
—¡Mierda! —grita Alex antes de transformarse también.
Sí, mierda, María está en problemas, necesitamos encontrarla. Es mi turno de transformarme y alcanzo a Alex en unos segundos.
—¡Ayúdenme, por favor! Estoy fuera del territorio de la manada en el lado este. ¡Por favor, alguien ayúdeme! —oímos a María suplicar a través del enlace de la manada.
—Estamos en camino, María, estaremos allí en unos minutos, ¡aguanta! —respondo, ya que Alex está demasiado preocupado para contestar.
—¿Necesitan refuerzos? —pregunta papá a través de nuestro enlace privado.
—No lo creo. Te mantendré informado.
—Está bien, ten cuidado.
A cinco millas después de pasar la frontera de la manada, vemos a María sostenida por el cuello por un renegado mientras otro está peleando con Luke. El que sostiene a María saca sus garras, listo para cortarla.
—Un movimiento más y la mato —dice, hundiendo sus garras en su cuello. Tan pronto como Luke huele su sangre, deja de pelear.
—Todos cálmense. Estoy segura de que podemos encontrar una solución pacífica —dice Lara con las manos en alto.
—Estamos en tu territorio, aquí son nuestras leyes. Esa zorra quiere jugar con nosotros. Nos está excitando desde hace días. Es hora de que nos satisfaga —responde. Haciendo que Luke, Alex y yo gruñamos.
Él sonríe y añade mirando a Lara y lamiéndose los labios:
—De hecho, tú vas a venir como retribución por el mal comportamiento de tu amiga. Dos chicas no serán suficientes para satisfacernos a todos.
Eso nos hace gruñir aún más.
Lara y Luke intercambian una mirada. Ella niega con la cabeza y responde con confianza:
—Eso no va a pasar. Ahora tienes dos opciones: Déjala ir y vete con vida o muere. Somos cuatro contra dos, no puedes ganar, así que déjala ir.
—En tus sueños. Si morimos, esa perra también morirá —responde y trata de cortar el cuello de María, pero no funciona. Gracias a la Diosa, pero ¿cómo?
—¿Qué demonios? —dice sorprendido.
Lara asiente ligeramente y Luke se lanza sobre el otro renegado, matándolo de inmediato. El que sostiene a María ahora está volando y Luke también lo mata yendo directamente a la yugular. Estoy simplemente atónito. Mató a ambos sin dudarlo y con precisión. Sé que su compañera estaba en peligro, pero parece que no es su primer asesinato. Y ese hombre, voló como si fuera por magia... ¡Magia!
—¡Bruja! —responde mi lobo mientras miramos a Lara.