Read with BonusRead with Bonus

Capítulo sesenta y cuatro

—¿Asher? ¿Dónde estás? Hay alguien en la casa —dijo, notando el temblor en su voz.

—Soy yo —respondió él.

—Pero... ¿qué estás haciendo? —preguntó claramente confundida.

—Sentado en el sofá de la sala —contestó, la simple frase sonando provocativa.

Ella miró por el pasillo, aún incapaz de verlo—....