Read with BonusRead with Bonus

LXXII

LXXII

—¿Estás segura de que estarás bien sola? —le pregunto a Lisa con preocupación.

Pero ella no estaba preocupada en absoluto, sus ojos estaban vidriosos y se reía y sonreía sin parar.

—Estaré bien, no te preocupes por mí, guapo.

Estábamos parados frente a su habitación, ella saltaba sobre las...