Read with BonusRead with Bonus

XXXVII

XXXVII

Su expresión atónita no apagó el deseo en sus ojos. Solo añadió una expresión de confusión a la mezcla de emociones plasmadas en su rostro.

—¿Por qué no lo preguntaste directamente? —Su tono era bajo y carente de emociones. Me recordó momentos antes, cuando el conductor tuvo que estacio...