Capítulo 4
Marcus's POV:
—Chloe Tristan...
Las orejas de mi lobo se levantaron al murmurar su nombre. Esperaba ver cómo era, pero Lima no había incluido una foto.
Maldito lobo estúpido, lo hizo a propósito.
Revisé su perfil.
Relaciones de sangre: Hija del difunto Alfa Jon Tristan y Luna Brenda del clan Tristan. Hija única.
Clan: Loba refugiada, se unió al clan Blackwood hace seis meses.
Estado: Loba plateada, aún no ha encontrado a su pareja, se mantiene alejada de la multitud y es bastante errante.
Eso me hizo sonreír. Ella era una errante como yo, podríamos vagar juntos, tomados de la mano mientras veíamos el atardecer en las colinas y hacer el amor bajo el cielo nocturno.
Sonreí mientras mis pensamientos se volvían traviesos. Mi lobo seguía murmurando tonterías en mi cabeza. Parecía que no era el único emocionado por conocerla, miré mis pantalones y gemí. Mi miembro estaba levantándose, palpitando en acuerdo con mis pensamientos.
Sacudí la sensación, queriendo suspenderla hasta el momento en que finalmente nos conociéramos. Volví mi atención al archivo en mi mano.
Atributos físicos: ¡Tendrás que descubrirlo tú mismo!
—Idiota —murmuré, casi ahogándome de risa. Lima sabía cómo alterarme, pero me conocía tan bien que sabía que preferiría verla en persona. No me ofendí, solo aumentó mi curiosidad.
Edad: ...
Antes de que descubras su edad, quiero que sepas algo: Gamma Titus está muy interesado en ella y la ha estado viendo durante algunos meses...
Mi lobo gruñó de celos, mis ojos brillaron de un marrón intenso mientras sentía ganas de destrozar a alguien. Parecía que me estaba perdiendo de algo, mi Beta y Gamma tenían algunas explicaciones que darme...
Volví a leer.
...así que está bien si no la quieres, el Gamma estará encantado de tenerla para él solo.
Tenía un par de narices que romper, ¡todos debían recordar su lugar!
Edad: Dieciocho años.
Los papeles se me resbalaron de las manos, un sentimiento amargo se arrastró en mi estómago. ¿En serio? ¿Una adolescente?
Me pregunté qué estaba pensando la diosa cuando me dio una adolescente como Luna. Nadie podía cuestionar el destino, pero en este punto, era bastante cuestionable. Solté un suspiro pesado mientras me recostaba en mi asiento.
¿Qué pasaría si ella entra en pánico cuando descubra cuántos años tengo?
¿Le gustaré entonces?
¿Me querrá?
Ella era tan joven e inexperta. Era una de las lobas más jóvenes del clan y yo, uno de los más viejos. Esperaba que eso no fuera un problema, realmente esperaba que no lo fuera. Nunca podría haber errores con el destino, todos tendríamos que aceptar nuestro destino.
Volví a los documentos, revisando algunas otras cosas irrelevantes que Lima había garabateado. No se daba mucha información, era sobre dónde se quedaba y con quiénes se relacionaba.
No pude evitar el gruñido que salió de mi boca cuando vi la relación de Titus con ella. La visitaba casi todos los días, excepto cuando ella se iba de la casa por días sin regresar.
Tenía agallas para siquiera gustarle en primer lugar y querer que fuera su pareja. ¿No había pensado en lo que le haría si llegara a enterarme? La suerte estaba de su lado de que no la había marcado antes de que yo lo supiera, ¡le habría arrancado la cabeza!
Mis ojos se dirigieron al pequeño reloj de abuelo que descansaba en la esquina izquierda de mi escritorio. Eran solo las seis y cinco de la tarde y el baile comenzaba a las nueve y media. Ya no podía controlar mi curiosidad y eso me estaba frustrando. Tampoco ayudaba que el lobo siguiera empujándome. Quería que fuera a verla y yo no quería eso. Quería esperar hasta esta noche para verla, ver cómo su cuerpo reaccionaba ante mí y qué pensaba de mi propuesta.
No me rechazaría. Incluso si quisiera, no podría. ¡Era lo que el destino había diseñado para nosotros y no teníamos más remedio que aceptarlo!
Por mi parte, habría preferido una pareja mucho mayor y con más experiencia, pero tendría que aceptarla tal como era...
Chloe's POV:
Me paseaba inquieta por la sala de estar, esperando a que Lily regresara. Mark se había ido hace tiempo, a cumplir con sus deberes. Lily sabía que no querría ir de compras con ella, ya que había dejado claro que quería mantenerme alejada de los otros lobos. Además de no ser muy sociable, también tenía una identidad que ocultar.
¿Cómo iba a protegerme ahora que el Alfa me quería como su compañera? Convertirme en Luna significaba decirle a todos en el clan lo que era, y esa información en particular... no estaba lista para revelarla. Todo lo que tenía que hacer era: conocer al Alfa Marcus y, si lograba no intimidarme, decirle que no estaba interesada en su oferta. Podría encontrar a alguna otra loba interesada y hacerla Luna.
Incluso podría mentir sobre tener una pareja, ¿verdad?
¿Verdad?
Mi loba sacudió la cabeza, claramente en desacuerdo con mi decisión. No iba a dejar que ella dominara mi pensamiento y nos metiera en problemas.
¡Nunca!
Sentí que Lily se acercaba y corrí hacia la puerta. Abrí la puerta de golpe para encontrarme con Lily con una mano levantada. Me silenció antes de que pudiera preguntar lo que quería. Mis ojos se dirigieron a su otra mano, que llevaba cuatro pequeñas bolsas de compras.
—Sé que quieres bombardearme con preguntas. Para que lo sepas, no tengo respuestas para ti. —Me empujó a un lado y entró en la casa.
Me giré, siguiéndola de cerca. —¿Cómo es él?
—¡Te dije que no me preguntaras nada!
—Pero en serio, ¿cómo es él? —insistí, presionándola para que cediera.
Entró en mi habitación, dejó las bolsas en la cama y se volvió hacia mí. Tenía una sonrisa astuta en los labios mientras tomaba mi mano y me llevaba al sofá. —¡Es extremadamente guapo! ¿Conoces el tipo de guapo de los 'dioses griegos'?
Asentí, mi rostro enrojeciendo. Podía sentir el calor subir por mi cuello y llegar a mis mejillas.
—Oh dioses, ¿veo a alguien sonrojándose? —se burló Lily, riéndose de mi estado ruborizado. —Sé que no esperabas esa respuesta de mí, ¡pero chica, es para morirse!
—Te he oído, reina Beta. Me pregunto cómo se sentiría Mark si te oyera ahora mismo.
—No puedo evitarlo —se abanicó dramáticamente. —Si mi compañero no me hubiera encontrado, definitivamente habría ido por él.
Rodé los ojos, —muchas gracias por tu aliento.
—¡De nada!
Nos quedamos en silencio. Se levantó y caminó hacia donde estaban las bolsas en la cama, sacando vestidos y colocándolos en la cama. Luego, sacó unos zapatos y joyas de las otras bolsas. Tenía más que suficientes vestidos y diamantes para elegir, también tenía un par de vestidos que me había regalado. ¿Por qué gastar tanto dinero solo para un baile?
—¿Lily?
—Hmm...
—¿No crees que te pasaste con toda la compra?
Guardó silencio por un momento, pero respondió: —No.
—¿No qué?
Suspiró, obviamente cansada de mis interminables preguntas. —No creo que me haya pasado. ¿Ahora puedes callarte y dejarme concentrar?
Me quedé en silencio, un puchero se coló en mis labios sin darme cuenta. Estaba preocupada e inquieta, nadie quería hablar conmigo y ni siquiera mi mejor amiga quería escuchar mis quejas. Nadie parecía querer estar de mi lado.
¡Piensa, Chloe, piensa!
Tenía que convencer a Lily de que era una mala idea, esa sería la única manera de persuadir a Mark y él, a su vez, convencería al Alfa...
—Lily, quiero hacerte una pregunta. —Ella asintió. Después de pensarlo, finalmente pregunté: —¿Equipo Alfa o equipo Gamma?
—¿Eh? —preguntó Lily, sin mirarme.
—Quiero decir... —dudé, queriendo elegir mis palabras con cautela. Maldita Lily y su temperamento rápido, me asustaba en momentos como este. —Si decidiera convertirme en reina Gamma, ¿apoyarías mi decisión?
Silencio.
Eso fue todo lo que me regaló. Tragué saliva, empezando a arrepentirme de haber preguntado eso en primer lugar, no podía permitirme que se enfadara conmigo. No podía ver su rostro, pero podía sentir su enojo irradiando de ella.
—Ve a ducharte —su voz autoritaria interrumpió mis pensamientos. —Necesitamos prepararte antes que a mí y tenemos menos de tres horas para estar listas.
Empecé a discutir, —No quiero—
——hacer esperar al Alfa —siseó con firmeza. Me lanzó una mirada de advertencia y luego salió de mi habitación.
Eso fue un gran éxito, ¿verdad?