Sospecha
Jace aclara su garganta y me saca de mis pensamientos.
—Zane, he contactado con Beta. Dice que su hija ha estado desaparecida desde ayer. De hecho, estaba en el bosque jugando con otros cachorros cuando ya no pudieron encontrarla —me dice—. Está en camino aquí con su compañera para recogerla él mismo. Llegarán en dos horas.
—¿No deberías informar a Alpha Ahri sobre esto? —pregunta.
Sí, me había olvidado de todo eso. La dicha de finalmente tener a mi compañera aquí ha consumido completamente mi atención. Tomo mi teléfono y busco en mi lista de contactos el número que necesito.
—Alpha Ahri, habla Alpha Zane de Midnight Moon. Debes haber oído que encontramos a la hija de tu Beta cerca de nuestra frontera —le informo.
El hombre al otro lado de la línea gruñe.
—Alpha Zane. Sí, mi Beta me informó. Este asunto debe ser investigado a fondo. Un cachorro no puede recorrer millas en un día. Aquí está pasando algo más —no suena exactamente indulgente como esperaba.
—Eso es seguro. Descubrí el olor de tu manada en mi territorio. Eso significa que algunos de tus miembros han entrado en mi país de manera inapropiada —le digo—. Eso es punible. Espero incluir esto en tu investigación.
Él resopla algo pero no responde a mis palabras. Decido no presionar las cosas, mi posición es muy sensible ahora que estoy a merced de su decisión en mis asuntos personales.
—Hay algo más que quiero discutir contigo también. Es inusual, pero nadie conoce las deliberaciones de la Diosa de la Luna —intento introducir el tema con cuidado—. Mercedes es mi compañera —suelto la bomba.
—¡¿Qué?! —grita en el altavoz—. ¡Atrévete a poner un dedo sobre la cachorra y te haré picadillo! Pedófilo. Voy por ella con mis guerreros. Y asegúrate de que esté sana y salva en la frontera. ¡Te mataré! —sigue enfurecido. Su respiración se escucha entrecortada a través del teléfono, puedo sentir que su ira ha llegado al máximo.
—Alpha Ahri, te puedo asegurar que de ninguna manera soy un pedófilo. Y los padres de Mercedes están en camino y recuperarán a su hija sana y salva —digo con calma—. No tengo intención de reclamarla aún, también conozco las leyes de los Were. Quiero discutir este asunto racionalmente y llegar a un acuerdo con todos ustedes.
—¿Acuerdo? ¿Sobre qué? —Ahri suena agresivo. Suspiro profundamente.
—Escucha, Mercedes es mi compañera destinada. La Diosa de la Luna ha decidido esto y lo acepto. Todo lo que quiero es poder visitarla en tu manada y tenerla aquí conmigo, para que se acostumbre a mi presencia y a la manada. Después de todo, ella es la futura Luna de la manada Midnight Moon.
Lo escucho tragar saliva varias veces, la noticia claramente no es fácil de digerir para él. Pero entonces somos dos, yo también tengo que acostumbrarme a esta situación inusual.
—Alpha, tú también conoces las leyes de los Were. Está prohibido mantener a los compañeros separados —le recuerdo—. Puedo asegurarte que ella está segura aquí, mi Beta se asegura de que no le falte nada aquí.
Al otro lado de la línea, finalmente lo escucho tomar una respiración profunda, tratando frenéticamente de calmarse. Ahri es conocido por ser temperamental, se necesita mucho para hacerlo razonar. En las reuniones pasadas de Alphas, se ha dado a conocer como impulsivo, y pocos quieren involucrarse con él. Pero no tengo otra opción ya que mi compañera es de su manada.
—Sus padres están en camino. Habla con ellos y si están de acuerdo, te espero en mi manada dentro de dos semanas para discutir este asunto más a fondo —finalmente concede—. Pero creo que este es un caso extraordinario. Primero la niña desaparece, luego de repente está a millas de distancia en tu manada y ahora resulta ser tu compañera —hace una pausa para reforzar sus palabras—. ¿Estás seguro de que no tienes nada que ver con el secuestro de la cachorra? —pregunta sospechosamente.
¡Dios mío!
¿Puede este hombre pensar lógicamente? Incluso Mercedes hace un mejor trabajo aquí que su Alpha. Y la paciencia no es exactamente mi fuerte. Suprimo mi molestia, no tengo más tiempo que perder con este idiota.
—Entonces explícame cuál sería mi motivo. La niña es mi compañera. Si lo hubiera sabido de antemano, simplemente habría ido a sus padres y luego a ti, como lo hago ahora —le explico como si estuviera hablando con un niño pequeño—. ¿Por qué debería tomarme la molestia de secuestrarla primero y luego parecer sospechoso?
El Alpha nota mi irritación y decide no tomarla en cuenta.
—¿Qué me quieres decir? —suena tenso—. ¿Por qué no sería posible? Hoy en día la gente hace de todo para conseguir lo que quiere. ¿Quién me dice que tú eres una excepción?
No, no, no, no voy a perder mi tiempo en tonterías.
—Escucha Alpha. Como acordamos, discutiré el asunto con sus padres y estaré contigo en una semana. Te avisaré con anticipación cuando llegue. También espero escuchar los resultados de tu investigación.
Antes de que pueda decir algo más, termino la llamada.
Jace y Cleo me miran con lástima.
—Sí, esta reacción era esperada. El hombre no es conocido por su alto coeficiente intelectual —suspira Jace—. Puedo decir que estaba listo para declarar la guerra incluso antes de tener suficiente información sobre la situación.
—Eso sería una decisión equivocada de su parte —agrega Cleo sarcásticamente—. Subestimar a Midnight Moon y actuar en contra de las leyes de los Were será su fin algún día.
Camino hacia el gabinete de licores y saco mi vino más caro. Ahora hay muchas razones para organizar una fiesta de tres personas. Midnight Moon ha encontrado su Luna y yo tengo una compañera.
Tal vez no de la manera que me gustaría, pero eso no afecta mi felicidad.
Le doy a mis amigos una copa y brindo con cada uno.
—Por un nuevo comienzo para Midnight Moon. Con una Luna, somos mucho más fuertes, invencibles —digo en un tono ardiente de Alpha.
Jace y Cleo asienten. Las burbujas de nuestras copas suben mientras nos miramos con confianza...