Read with BonusRead with Bonus

33. Almas gemelas

Iosif olfateó discretamente el muy leve olor de los lobos. Su presencia en el aire era tan ligera que cualquier otro ser sobrenatural ni siquiera lo percibiría, pero después de pasar más de cien años, estaba destinado a volverse hábil en reconocer los olores más sutiles. En ese momento supo que los ...