Read with BonusRead with Bonus

Cuarenta y tres.

Colt miraba a Elijah con una expresión tan venenosa que le hacía sentir como si ella le hubiera abofeteado físicamente. Su equilibrio vaciló ante la sorpresa de la acusación y bajó ligeramente al hombre que la había amenazado. Sin pensarlo dos veces, siguió el movimiento y, alcanzando con su otra ma...